¿Qué es radiculopatía crónica?
La radiculopatía afecta a multitud de personas. Al ser una dolencia que puede atacar a toda la espalda y zona de la columna, son muchos los trabajadores que tienen esta sintomatología. Se trata de un trastorno de la salud en el cual hay daño o enfermedad en un nervio raquídeo (nervio que sale de la columna vertebral) que causa dolor, debilidad, entumecimiento y alteraciones sensoriales en una o más extremidades.
La causa más común de radiculopatía crónica es la degeneración de la columna vertebral, a menudo debido a la osteoartritis, pero también puede ser causada por una hernia de disco, tumores, infecciones, traumatismos, etc. Existen dos tipos de radiculopatía:
- Radiculopatía lumbar. Cuando el dolor se sitúa en la parte baja de la espalda.
- Radiculopatía cervical. Cuando las molestias se localizan en la zona alta de la espalda.
En ciertos casos, como vamos a ver, puede ser objeto de una incapacidad permanente, como parte de una serie de síntomas que conformen una enfermedad grave.
¿Qué grados de radiculopatía lumbar hay?
Se clasifica en diferentes grados según la gravedad de los síntomas y el compromiso nervioso. Aunque las clasificaciones pueden variar, generalmente se utilizan tres grados principales para describir la radiculopatía lumbar, que son grado I o leve, grado II o moderado, y grado III o severo:
- Grado I: los síntomas son leves y pueden incluir dolor de espalda, debilidad muscular y parestesias (entumecimiento o hormigueo) en las piernas.
- Grado II: los síntomas son moderados, con dolor de espalda, debilidad muscular y parestesias en tren inferior, así como una pérdida parcial del reflejo muscular.
- Grado III: los síntomas son graves y además de lo anterior, a veces incluye una pérdida completa del reflejo muscular.
¿Cuándo operar una radiculopatía?
La operación es una decisión difícil y se realiza cuando falla la respuesta al tratamiento conservador (mediante terapia física, mediación, inyecciones de corticosteroides, y rehabilitación). Si los síntomas no mejoran, o si hay una pérdida significativa de la fuerza muscular, puede considerarse la cirugía.
Se realiza para liberar la presión en el nervio raquídeo, mediante procedimientos como la descompresión lumbar, la fusión vertebral o la hernioplastia.
¿Qué es la radiculopatía l5 S1?
Es la que se ubica entre las vértebras L5-S1, y la fisioterapia puede ser una parte importante del tratamiento de esta radiculopatía, ya que puede ayudar a aliviar el dolor, mejorar la flexibilidad y la movilidad, y fortalecer los músculos que soportan la columna vertebral.
Sin que esto sea una guía ni sustituya los servicios de un fisioterapeuta colegiado, algunos de los ejercicios son los siguientes:
- Estiramientos para la espalda y las piernas: ayudan a mejorar la flexibilidad y reducir el dolor.
- Ejercicios de fortalecimiento: estabilizan la columna vertebral y reducen la presión en el nervio afectado.
- Ejercicios de movilidad: mejoran la movilidad de la columna vertebral pueden ser beneficiosos para reducir el dolor y la rigidez.
- Terapia manual: técnicas manuales, tales como manipulaciones vertebrales o masajes, reducen la inflamación y el dolor.
- Modificaciones en el estilo de vida: se puede recomendar cambios en el estilo de vida para ayudar a prevenir futuros episodios de dolor, tales como evitar permanecer sentado por períodos prolongados, mantener un peso saludable, y evitar las actividades que causan dolor o irritación.
Radiculopatía invalidez
Si pese a todo el tratamiento, ejercicios, estiramientos, rehabilitación y fisioterapia, el dolor y las limitaciones persisten, la incapacidad permanente laboral es una posibilidad a tener en cuenta. Para ello, las mencionadas limitaciones deben constar en informes médicos, que se aportan a la Seguridad Social para acreditar la dolencia. En Toro Abogados, hacemos un estudio de viabilidad son coste, en una primera visita gratuita.
¿Cómo se cura la radiculopatía crónica?
No hay una única cura para esta grave afección, sino que existen diversas opciones para tratar los síntomas y mejorar la calidad de vida del paciente afectado: tratamiento conservador, medicamentos y fármacos, administrar infiltraciones, fisioterapia, o en último caso, cirugía de descompresión.
Además, un estilo de vida sano, siempre va a hacer mejorar el estado del paciente con radiculopatía.
¿Qué medicamento es bueno para la radiculopatía?
Los medicamentos pueden ser una parte importante del tratamiento de la radiculopatía lumbar o cervical para aliviar el dolor y reducir la inflamación. Algunos de los más recetados son los analgésicos (paracetamol o ibuprofeno), antiinflamatorios no esteroideos (AINEs), corticosteroides, antidepresivos, o relajantes musculares.
¿Qué puede provocar una radiculopatía?
Puede tener varios orígenes. Aunque la genética tiene un papel importante, puede venir causada por una hernia discal, por una estenosis espinal, o por una espondilosis. Asimismo, una lesión en la columna es la génesis de la radiculopatía muchas veces, y también tumores o infecciones en la columna.
Por último, a veces la causa es una enfermedad autoinmune. Como vemos, es un síntoma grave de otras patologías igualmente importantes.
¿Cuánto tarda en curar una radiculopatía?
Aunque no existe una curación de la radiculopatía, la duración depende de la persona y de la intensidad de la dolencia. Unas veces, los síntomas se van en días, pero otras requieren tratamiento continuo. Hay que seguir las recomendaciones del médico y del fisio, y tener un plan personalizado.
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